Esto no quiere decir que yo tenga algún tipo de "supervisión" o algo por el estilo, ni mucho menos (porque a mi a veces me pasa)... El problema era que él no tenía los anteojos puestos!!! y claaaaaaaaa... como querés que viera... UAJUJA no mentira. Esto me trae a la cabeza un pensamiento (que iba a postear ayer pero estaban en mantenimiento, entonces me quedé con las ganas).
¿Por qué corremos? ¿Hacia dónde corremos? ¿De quién corremos?
Son preguntas que me hago cuando veo el frenesí al que nos ata(mos) la vida. Tenemos que ser buenos, estudiar para tener un trabajo, tener un trabajo para alimentar a nuestra familia, aguantar lo suficiente para jubilarnos y ahi preocuparnos por los nietos en la poca vida que nos queda... yo pregunto ¿tuvimos vida alguna vez? ¿A quién se le ocurre pensar que la realización de uno mismo se encuentra en este proceso?
Mientras éramos buenos, nos olvidamos de lo que es reír, disfrutar, hacer lo que nos hace felices. Mientras estudiábamos, nos olvidamos de salir a tomar aire, de tirarnos en el pasto a tomar mate.
Mientras trabajábamos, nos olvidamos de parar a ver un atardecer porque sino nos sacan el presentismo por llegar tarde.
Lo único que aprendimos no fue a vivir, sino a obedecer.
Mientras "vivimos", no nos damos cuenta que la vida nos pasa por al lado, nos penetra y nos interconecta, nos hace tener frío, calor, bronca, miedo y alegría inigualables. ESTO es vivir, nada más. Quedamos atados al pasado y tirados hacia adelante por el futuro, ¿y el presente? El pobre presente, que es nuestro único tiempo real, se queda esperando que le demos bola, que bajemos de las nubes y honrremos a él y a nuestra Tierra y no olvidarnos los anteojos.
Les dejo dos frases:
"Busqué a Dios en lo alto, en la cima de las montañas y no lo encontré.
Busqué a Dios en lo bajo, en lo profundo de los mares y no lo hallé.
Busqué a Dios en los desiertos y en los glaciares,
en los pantanos y selvas y tampoco.
Hasta que exausto, me quedé sentado y comencé a llorar, por no haber encontrado a Dios.
En la calma del llanto, una voz me habló, una voz que venía de mi interior.
Y supe que lo había encontrado".
(No soy católico, pero dejemos de buscar a Dios en la ionósfera, está más cerca de lo que pensamos).
"Desde que existe la humanidad el hombre no se alegra lo suficiente; ¡únicamente éste, hermanos, es nuestro pecado original!
Y aprendiendo a alegrarnos es como mejor nos olvidaremos de hacer mal al prójimo y pensar medios de hacer mal."
Mi amigo personal, Zaratustra.
Buena vida para todos :D
